PAOLA REY, EN LA PIEL DE UNA ‘SAPORRITA’ MUY GUERRERA

PAOLA REY, EN LA PIEL DE UNA ‘SAPORRITA’ MUY GUERRERA

Feliz de volver a estar en las pantallas acompañando a los televidentes nuevamente, la protagonista de Pobres Rico cuenta sobre su experiencia en esta telenovela.

Paola Rey se declara muy instintiva a la hora de aceptar un proyecto en televisión. La actriz santandereana sólo tiene una condición cuando le presentan una nueva historia en la que quieren que participe: el personaje que podría representar debe generar en ella una química y conexión especial. Con Mariela Siachoque, personaje que encarna en Pobres Rico sucedió esto y por eso actualmente la vemos todas las noches en Nuestra Tele.

De Mariela, o ‘La Saporrita’, como le dicen a este personaje que genera admiración y muchos piropos de todos los habitantes del barrio Ciudad Roma, a Rey le agradó que es una luchadora en todo el sentido de la palabra, no sólo porque conoce del mundo de la lucha libre, sino también porque es una mujer trabajadora, guerrera y que se le mide a todo para sacar adelante a su familia.

Rey afirma que como Mariela, lo más importante en su vida para ella es su familia, y que también es una persona luchadora, que sigue sus sueños, como lo hizo hace ya 14 años cuando se le presentó la encrucijada entre seguir estudiando ingeniería o dedicarse tiempo completo a la actuación. Aunque su decisión fue completamente acertada y hoy en día es una de las actrices más cotizadas del país, cree que como ingeniera tal vez también hubiese sido exitosa por la pasión que le pone a las cosas que hace.

Para este papel, esta santandereana tuvo que sumergirse en el mundo de la lucha libre, del tejo, de los huesos de marrano y muchas otras características del pintoresco mundo popular, ese mundo en el que más no identificamos como colombianos.

“EL PRINCIPAL RETO ERA QUE EL TELEVIDENTE VIERA EN MARIELA UN PERSONAJE DISTINTO A LOS QUE YO HABÍA INTERPRETADO ANTES”

¿Qué tanta libertad tuvo a la hora de construir el personaje?

Total. Cuando terminé ‘Las Detectivas y el Víctor’ me contaron del proyecto y del personaje. Me gustó y sentí esa conexión que me deben generar las historias y los personajes. Creo que fui el primer actor confirmado en el proyecto y en todo el proceso de casting para los demás personajes compartí escena con los otros personajes. Ahí comenzó todo el proceso de creación junto a los libretistas y Pepe Sánchez.

Precisamente es su segundo proyecto en línea con el mismo equipo de dirección y libretos, ¿Qué le genera esa confianza que tienen en usted este grupo?

Que uno de los mejores directores de televisión como Pepe Sánchez y que un libretista tan talentoso como Juan Manuel Cáceres se fijen en ti es un orgullo muy grande. Siento que mi crecimiento como actriz en mucho se lo debo a ellos. Además me abrieron al mundo de la comedia.

¿Qué retos presentaba este personaje?

El principal reto era que el televidente viera en Mariela un personaje distinto a los que yo había interpretado antes, en especial a Chabela de ‘Las Detectivas y el Víctor’, porque vienen de una extracción parecida, son de clases populares. Pero son muy distintos, tiene un carácter, una corporalidad y una forma diferente de ver la vida. Creo que puede sobrepasar este reto, pero la respuesta la tiene el televidente. 

¿Cómo manejar este personaje que es un poco marimacha pero a la vez tierna?

Realmente no es que Mariela sea marimacha, aunque si tiene su parte masculina bien desarrollada por el ambiente en el que ha crecido como la lucha libre. Además, es la verdadera cabeza de la familia, por lo que tiene que ser fuerte. Esto no va en contra de que genere ternura y que eso sea uno de sus mayores atractivos.

En la telenovela tiene que hacer algunas llaves y otros gestos propios de la lucha libre, ¿le tocó tomar clases?

Sí, con Diego Vásquez y Santiago Prieto, que hacen en la novela el papel de mi papá y mi hijo, tomamos clases de lucha libre con luchadores reales. Fue más o menos durante dos meses con una intensidad de dos horas diarias. No es que me haya convertido en una experta, pero si aprendimos muchas cosas para integrarlas a nuestros personajes más allá de los golpes. Uno cree que estas personas son muy rudas, pero la verdad es que la mayoría dejan esa fiereza en el ring.

¿Es realmente divertido hacer comedia?

Sí, hay situaciones que obviamente luego de repetirlas varias veces ya no es chistoso. Pero la comedia también se presta bastante para la improvisación del actor y tenemos un elenco muy talentoso, que me hacen reír seguido con sus ocurrencias. Creo que las emociones de los personajes si afectan al actor. Si haces un personaje que todo el día se la pasa llorando y está la mitad del día en ese drama, eso te afecta. Y claro, me gusta más reír que llorar.

Comenzó muy joven en la actuación y ya lleva cerca de 15 años en las pantallas. En la serie comparte con varios actores que están comenzando su carrera. ¿Les da consejos?

No soy de dar consejos a menos de que me los pidan. Lo principal que recomiendo en este tipo de situaciones es que tengan disciplina, que cojan las cosas con calma y que nunca se olviden de su familia y allegados cercanos, porque en medio de todo, ellos son lo más importante y nunca se deben descuidar.

Últimamente dentro de las características de sus personajes es que son madres, ¿eso no le ha influido en las ganas de también serlo en la vida real?

La condición de Mariela es distinta a la mía porque ella es una madre soltera, una mujer como muchas colombianas que han tenido que sacar adelante a su hijo sin el apoyo de su pareja. Yo estoy muy feliz en mi matrimonio y apenas estamos comenzado. Queremos disfrutar de nuestros primeros años en pareja y luego por supuesto tenemos planes de tener hijos. No tenemos afán, vamos con calma.